rev:text
| - La Salle à Manger cumple a la perfección las características del restaurante de moda: decoración de diseño, servicio amistoso, ambiente relajado, materia prima de calidad y... precios por encima de la media.
Fui el viernes pasado a cenar con mi marido y sin duda hicimos una buena elección. Aunque el local estaba lleno y no habíamos reservado, no tuvimos que esperar ni cinco minutos a que nos sentaran. El ambiente es informal y algo ruidoso, perfecto para lo que nosotros estábamos buscando.
Como no teníamos mucha hambre, pedimos directamente los platos principales: un solomillo de ternera para mi marido y un confit de pato para mí, ambos un acierto. Hicimos bien en no tomar aperitivos porque los platos son muy generosos (y yo soy de buen comer, advierto). Tienen una buena selección de vinos aunque al final nos decantamos por tomar unas cervezas.
Por último, vimos en la carta que sirven cochinillo bajo reserva para doce personas por $500, es decir, $40 por barba. Si algún día nos entra mucha nostalgia de un buen cochinillo segoviano y conseguimos convencer a otros diez, ¡lo mismo nos damos el lujo!
|