Tengo tres meses visitando este lugar una ves por semana y eh notado la diferencia empezaron a usar un plato más grande y voluptuoso pero con la misma cantidad de comida o menos. Siempre que llego todos saludan amablemente pero esta ultima ocasión pienso que Mariana estaba enojada pensé que me iba atender y se dio la vuelta sin saludar. También la máquina de sodas la deben arreglar siempre que me sirvo brisk se queda tirando hasta que aplastas otro tipo de soda. Creo que es mi última visita a esta ubicación