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| - Continuando con el cuentito #OhCanada, la ciudad canadiense que reseñaremos hoy es Toronto, producto de mi segundo viaje a Canadá.
Muchos se preguntarían ¿Para qué mi"!"#%da fuiste hasta allá? La respuesta es simple: Porque tenía la guita y las ganas.
Ni bien llegas al aeropuerto internacional de Toronto te hacen las típicas preguntas migratorias cual USA aunque un poco mas intensas. Son bastante fachos con el tema de la inmigración dado que la ciudad aparentemente tuvo un boom de chinos en su momento y ahora están tratando de controlar un poco. Aprobado el ingreso, nos alojamos en el Sofitel en Downtown y nos dispusimos a recorrer la ciudad por nuestros propios medios caminándola completa, como corresponde...
Toronto en una ciudad canadiense de la parte inglesa que toma prestados ciertos aspectos según mi percepción de Chicago. En su downtown tiene espectaculares edificios donde se gesta el polo económico mas importante de Canadá y cuenta con una imponente costa que mira al lago Ontario, que mas que lago considéralo como un inmenso río.
La primera cosa que llama la atención de esta ciudad siendo Argentino es el orden: Todo prolijo, todo bien, todo anda. No hay inseguridad. pero nada. Es prácticamente imposible que te roben o hurten. Me costó mucho asimilarlo e incluso me llevó días, como una ciudad tan grande ande todo tan bien.
Toda esta perfección tiene como contrapartida que no hay joda. Estábamos en el patio de comida en un mall cenando A LAS 5:45 PM y ya estaban bajando las cortinas!!!!! Si, allá en invierno tipo 3:30 o 4PM se hace de noche y la gente cena tempranísimo! Yo como porteño les seguía el ritmo de onda y después me preguntaba ¿Que hacen hasta la hora de dormir? INTRIGA (y no me vengan con lo que ya saben...)
Esa falta de vida nocturna (al menos la legal, normal) le baja un punto a la ciudad, pero es parte de la cultura de ellos aparentemente...
Durante el día, es lindo paseo ir a la torre CN que es un edificio rascacielo enorme con una vista espectacular. Pasear por la costa, visitar el Royal Ontario museum, el Ontario Science museum e ir de shopping al espectacular Toronto Eaton Centre.
Sus habitantes, sin que nadie se lo tome mal, son todos lindos, exitosos, felices, elegantes. Parecen como programados para ser perfectos. Por momentos te pensás que estás en la Matrix, tenés un deja vu y va aparecer Mr Smith a cancelarte...
Para ir terminando, es una muy linda ciudad a la que no volvería porque es como para ir una sola vez, pero que me gustó mucho conocer como para contrastar un poco otras ciudades más típicas como NYC y ampliar mi listado de lugares que conocí y quedaran parte de mis recuerdos por siempre.
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